COLUMNA: Por fin es viernes. HOY: "Libros, ceviche y lápiz labial" D.D.Olmedo.- Viernes 19/Septiembre 2014.




COLUMNA: Por fin es viernes.
HOY: "Libros, ceviche y lápiz labial"
D.D.Olmedo.-
Viernes 19/Septiembre 2014.

"Escoge, pero escoge de una buena vez... No suceda que la vida olvide que ya te perdono una vez..." (Nicolás Sendero, en: EMDLCA).-

Charles James, un estrafalario, excéntrico y negado administrador de sus finanzas, vivió hasta el último de su días como se impuso vivir: un hábito poco frecuente en el arte de ser, antes que parecer...

Hijo de militar londinense y muñeca norteamericana, a los 20 años abrió en la bella Chicago, una tienda dedicada a colocar sombreros sobre cabezas de pudientas y encopetadas señoronas de la sociedad estadounidense... Sin embargo, a poco andar, quebró. En aquellos años, entre sus clientas, la diva Coco Chanel comentó: "si él sigue existiendo, entonces mi carrera no tiene destino".

Diseñador de gran trayectoría y catalagado como el inspirador del NEW LOOK, fue adorado por Cristian Dior, pero al mismo tiempo, traicionado por su propio temperamento e inestable lacónico humor... A la postre le significaron el ensimismamiento total y visceral, la bancarrota y el autoexilio que lo llevó a su muerte en el 78, sin escribir más allá que un título (Beyond Fashion) de lo que habría sido un texto con sus memorias...

No soy erudita en Biografías, todo lo contrario. Pero, cosa curiosa pasa: en determinadas oportunidades que necesito decir algo y no encuentro el hilo, los símbolos y las señales simplemente, aparecen... Y así ocurrió, alguien me comentó en Mayo pasado que el MET de NY, renombraría con aquel título una exhibición auspiciada por el COSTUME INSTITUTE (patrocinaron antes a Alexander McQueen y Murcia Prada, entre otros), muestra en la que seguramente, se destacaran íconos como el "taxi dress" asi como otros complejos y matemáticos diseños forjados bajo su puño...

Aunque a mediados de la década del 60' intentó reflotar su marca sin éxito, consiguió establecerse en un cuarto-taller del famoso Chelsea Hotel (mítico refugio de Sid Vicious, voz de los emblemáticos Sex Pistols), lugar en el que residió hasta la época decsu muerte a consecuencia de una neumonía. 

James no es el único caso de talento desperdiciado. La evidencia considera una prolífica colección de mitos y leyendas a este respecto; personajes que pudieron ser pero que nunca despegaron, extinguiéndose sin definir un legado claro capaz de atestiguar la verdadera dimensión del talento sin explotar en ellos. 

A pesar de lo anterior, yo pienso un poco diferente.

Tanto James como otros casos similares, a quienes se les atribuyó falta de disciplina, rigor u organización, quizá nada de esto les importaba sino todo lo contrario; tanto para aquel como otros personajes, el goce no pasaba en medirse por el resultado, él gozaba con el proceso extenso, indeterminado y perfeccionista de cada meticuloso vestido de caída perfecta... no en vano Dior posee a la fecha la factura que le caracteriza.

Me llamó la atención la singular historia de Charles James, quien a pesar de haber nacido en cuna de oro, demuestra que no siempre lo accesorio sigue la suerte de lo principal sino todo lo contrario e incluso, los efectos favorables son aprovechados por terceras y cuartas personas, como se da en la especie con la promisora Casa de Modas iniciada por Roy Halston, discípulo de James en las postrimerías de su vida. 

Esta singularidad me toca de cerca. Ya que más allá de la sutileza técnica, yo siempre me he regido por la intuición, misma que la mas de las veces me llevó a saber ciertas cuestiones inexplicables (soy autodidacta en temas regulares de diseño) como tallaje, caídas, cualidades pero más curioso aún, el olfato infalible para determinar qué iba a usarse, cómo, cuándo, en qué partes, etc., en cierta forma, sin saberlo fui una "Trendsetter". 

Pero un talento que siempre se me dio de forma natural, a la larga se ilustró como un don sin reputación, justamente por haber sido estigmatizada de irresponsable, desorganizada y votarate. Sin embargo, en mi defensa debo añadir un pensamiento muy parecido al de James: Más me importa crear, y verme en lo que hago que soportar peso de la instrucción obsesiva... Es cierto, yo podía ser un desastre administrando, eso es un hecho, pero el talento estaba, estuvo; existe. 

¿Cómo le fue a Charles James?

Bueno, objetivamente (para el mundo entero y bajo la consigna absurda de tender a estandarizar, segmentar, controlar y estructurar en piras medibles) quizá no pasó de geniecillo sin duende. Pero para quienes disfrutamos del arte sin parte, la cosa subterranea es maravillosa. A veces, no se pregunta derechamente a las personas si quieren destacar; solo se les juzga si no lo logran... entonces, sobreviene en mi un razonamiento natural: ¿Porqué se trata de igualar? ¿Qué hay de dramático en aue existan seres humanos que no deseen medirse por un resultado? ¿Cuál es el objetivo de perseguir el caviar si quizá sólo te apetece comer ceviche?

A lo mejor -y que si me parece más sensato- lo que en verdad sucede es que la gran mayoría no comprende casi nada y se mueve silenciosa, casi siempre, oscilando en esa curva indecente de inconciencia... Al desconocer la verdad, y aquejados de UN síndrome que no sana jamás, sólo sucumben ante la amenaza de la DIFERENCIA, expresada esta de tantas maneras y que tanto miedo y frenesí engendra en medio del desconcierto de los que no soportan ser desafiados a despertarse.

Yo, de alguna manera siempre supe que tendría éxito en Merced 243; lo que no sabía es que sería castigada por ello. A veces, es menos colapsante llamar al orden a la obeja descarriada que darnos cuenta que la diferencia no hace daño sino todo lo contrario, juega como gancho en la tentación para lograr evolucionar y trascender a nosotros mismos.

El pequeño gran problema es que 94% de la población prefiere la reivindicación póstuma del genio creativo -antes censurado como "diferente"- (sin ir más lejos, se prohibió la exhibición de la obra de Parra en un led gigante de la Plaza Italia), que un reconocimiento oportuno, aún cuando esto signifique aceptar las diferencias y que más encima se es un corriente escurriendo por la pira que mencioné más atrás...

No tengo dudas sobre que, mi karma, me ha puesto generacionalmente en un mundo comandado por la exacerbación de apego miedoso... Nadie tiene tolerancia al cambio, al giro inesperado, a la vuelta de tuerca y suelen disfrazarlo de convenciones enfermas de huecas, carentes de sentido común peto bien premunidas rigores que vuelven al ser humano más docil, menos contradictor y con demasiado miedo como para rebelarse: el imperativo categórico es pertenecer. Cuesta caro desmarcarse, hacer por hacer, disfrutar sólo por el placer y sentir sólo por ser...

Mi consigna no incita a la desobediencia civil, yo apelo a la vivencia personal y a la emoción que produce el proceso creativo intuitivo e interconectado con todas las otras esferas y en cualquiera de sus recorridos, con todos sus matices y bemoles, abortando la errada suposición que ser diferente, innovar, y no desear las mismas añosas consignas e ideales, te conducirá a un Purgatorio, en donde más encima, a diario llegaran noticias sobre tu pobre desempeño, tu desprecio por la vida y más blah, la nula fama y el slogan favorito colgado como rótulo que pasaste porcla vida sin pena ni gloria.

Quien sepa cómo es, qué siente y cuál es el camino, entonces sabe que haber vivido como James, a lo mejor no fue tan terrible, y lo que el resto signó como desperdicio, no es más que la sanidad, la cordura y sobre todo, la coherencia. Tal y como a mi me pasa si prefiero los libros al lapiz labial.

Comentarios