Química.

QUIMICA.

Una se imaginaría que la sola decisión, activa la ejecución. Craso error. Hay comandos que continúan manejándose a su antojo.

La primera vez que lo vi, me gustó de inmediato, cuesta que me mueva lo físico y sin embargo él, lo consiguió. Hoy le he dicho que parte de su encanto es justo sea «escorpión», cosa intensa en su natura plutoniana que empuja hacia laderas más intensas. La verdad es que el hombre se mueve con sigilo de ninja y admito haberlo juzgado mal. No solo tiene salidas dulces (nunca un manjars) y sin embargo, ese guiño a ceder para replantearse, me agrada.

Aunque no conozco todos sus talentos, su insolente forma de comportarse, exhorta a querer más, ver más, explorar más. A ver qué sale de todo eso.

Carlos es muchos más joven, no me molesta (parece que a él, tampoco), y lo que muestra en piel, se ve tentador... me ha dicho que es medio salvaje, que las costumbres las trae de talller, de tuercas; adn paterno, me dice. Ye creo todo, aun no escucho ni su voz en mi nuca, y yo me erizo...

Siempre es bueno ceder, cambiar, dejar de creer que tenemos tanta razón en todo, y spbre todo, no pensar más estupideces, como que está todo dicho o controlado. Mejor no estarse siempre a la suerte de la olla, porque pensando en mero estofado no va a tocarte filete. Y él, sugiere la componencia completa, sabrosa, sutil, que lo pienso y se me vuelve agua el paladar.

En buena hora.

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